Los cristiano demócratas han elegido a Armin Laschet para sustituir a Merkel como cabeza de cartel en las elecciones del 26 de septiembre. Pero el cambio de liderazgo en la CDU parece eclipsado por el ascenso de los verdes, que con Annalaena Baerbock al frente se han acercado al centro y se presentan como posible socio de la CDU en un nuevo gobierno.
El futuro alemán es verde. La población lo tiene claro: Sin ecología no hay futuro, tampoco económico. La pandemia es el espejo de esa premisa. La apuesta política verde no es solo una posibilidad más, sino que cuenta aquí con el respaldo de amplias mayorías. El partido de Los Verdes son hoy el centro político y no una promesa de revolución lejana e ilusoria. De hecho Alemania se dirige hacia una economía de mercado socioecológica. Lo dice a Consejeros Achim Truger, profesor de Socioeconomía, Política y Finanzas estatales en la Universidad de Duisburg-Essen y, desde marzo de 2019, miembro del Consejo Asesor de Economistas del Gobierno alemán, los llamados “cinco sabios”: “La política tiene mucho por hacer en el futuro si quiere superar la transformación socioecológica. Deberá volver a ser razonable en lo macroeconómico y apostar mucho más por inversiones públicas y solidaridad social. Si se consigue, no habrá que preocuparse por el futuro de la Unión Europea”. En la nueva coalición recién formada por Los Verdes y la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU) en Baden-Würtemberg es la CDU quien destaca que la protección climática es tan importante para ella como para el presidente verde, Winfried Kretschmann, en su tercer mandato. La industrial e innovadora Baden-Würtemberg quiere ser “klimaneutral” para el año 2040 y apuesta para ello por las innovaciones tecnológicas.
Tras las elecciones de marzo en Baden Würtemberg, la coalición entre Los Verdes y la CDU dice que quiere ser «klima neutral» en 2040”