El inicio de conversaciones requiere un mediador.
“Las ‘propuestas de negociación’ que comunican las partes son sencillamente disuasorias y más bien sugieren que cada una espera beneficiarse continuando la guerra mucho más que sentándose a negociar… Ucrania está sometida a una guerra devastadora que soporta con admirable firmeza pero es imperativo reflexionar sobre el futuro de la reconstrucción y plantear el final de esta guerra antes de que condicionantes presupuestarios o impredecibles giros políticos generen obstáculos difíciles de salvar en Europa”
RECORDANDO LAS PRIMERAS LÍNEAS de la gran novela de Tolstoi, podría decirse que cada guerra –como cada familia mal avenida– presenta características exclusivas, tan diferentes que hacen especialmente difícil normalizar los procesos que deben concluir hostilidades y concertar la “paz”.