“La desigualdad de EEUU es un reflejo del profundo racismo que construyó este país”
“El racismo es lo que provocó a Trump. Y también lo que trajo desigualdad. El poder en Estados Unidos ha estado en manos de los protestantes blancos durante la mayor parte de nuestra historia, y la ideología de la supremacía blanca dio licencia para la esclavitud, el apartheid, el genocidio de los indígenas americanos, el sentimiento anti asiático -reflejado por ejemplo en la ley de exclusión china de 1882- y toda la reacción contra lo hispano que vemos ahora”.
Jeff Sachs es el economista activista. Una entrevista con él parece más una conversación con un líder de un movimiento social o político que con uno de los profesores titulares más jóvenes de la Historia de la Universidad de Harvard. Nadie identificaría hoy a este experto en desarrollo de la Universidad de Columbia con el epítome de los ‘Harvard Boys’, los economistas que en el imaginario de la izquierda sucedieron en los noventa a los ‘Chicago Boys’ de los setenta como evangelizadores del credo del consenso de Washington. Nadie pensaría hoy que Sachs acuñó incluso el término “terapia de choque” para referirse a los ajustes duros y rápidos de política económica para contener precios, aumentar la competitividad, y llevar a cabo privatizaciones. En algunos países, como Polonia, el experimento fue un éxito; en otros, como Rusia, una catástrofe. En ambos casos, Jeff Sachs jugó un papel central.
A sus 66 años, el Sachs de 2021, que acaba de publicar en España su último libro, ‘Las Edades de la Globalización’ (Deusto), sigue creyendo en la integración de la economía mundial tanto como hace tres décadas y media, pero, a poco que se le dé pie, se lanza por vericuetos anti-Trump que no siempre tienen que ver con la pregunta que se le ha hecho. Genio y figura, Sachs es uno de los economistas más influyentes del mundo, y cuyo activismo, en realidad, obedece a una premisa a menudo olvidada por la Economía: ésta es una ciencia social y moral, no una mera prolongación de la Física pero con personas y empresas en vez de átomos.