Texto: Carlos Balado (Profesor de OBS Business School y director general de Eurocofin) •
“Los americanos, ciudadanos y votantes, y los países socios y vecinos terminarán por preguntarse más pronto que tarde a qué intereses responde Donald Trump”.

Trump ha forzado el sistema legal estadounidense al ordenar aplicar aranceles a Canadá, México y China. Las decisiones que ha tomado se basan en la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974, que otorga autoridad para tomar represalias contra otros países por actos irrazonables que afecten al comercio estadounidense, y la Ley de Poderes Económicos de Emergencia Internacional (IEEPA ), que otorga a los presidentes una amplia libertad para responder a emergencias nacionales. Al utilizar los aranceles como medio para cerrar las fronteras Norte y Sur de Estados Unidos al comercio normal, el gobierno Trump pone a prueba los límites de la delegación de autoridad de emergencia que la Constitución americana otorgó al Congreso. Es inédito en la política comercial estadounidense porque se han utilizado las leyes de seguridad nacional, la Sección 232 de la Ley de Expansión Comercial y la Ley de Poderes Económicos para Emergencias Internacionales (IEEPA) para amenazar e imponer aranceles a los vecinos y socios comerciales norteamericanos. Esas normas sobre seguridad habían sido utilizadas durante la guerra fría y aplicadas a países con los que Estados Unidos mantenía conflictos; estaban pensadas para un contexto que requería una estrategia de seguridad y de rivalidad geopolítica diferente. No obstante, Trump recurre a la autoridad de represalia, la Sección 301 de la Ley de Comercio de 1974, porque ya se ha utilizado en el pasado para tratar con China.

